Se rumorea zumbido en oraciones
Tú que le diste a tu amado hijo el regalo de venir al mundo y crecer en el seno de una grupo, te suplico no nos abandones. Permítenos seguir unidos bajo la ojeada misericordiosa de nuestra amadísima Doncella María.Que tu Espíritu santificador nos haga partícipes del triunfo sobre el mal y testigos de la novedad de vida en el inclinación.Las